Sonriente, espontáneo y dispuesto para hablar de todo lo que la prensa tanto nacional como internacional le preguntaran en 40 minutos que duró esta interacción con los medios, Scorsese agradeció el cariño y el apoyo que siempre el pueblo mexicano le ha brindado en cada uno de sus proyectos, más ahora con este filme que narra la violencia que se vivía sobre algunos pueblos en la década de los 20 del siglo pasado.
El cineasta de 80 años mencionó que esta historia del pueblo de los Osages lo atrapó décadas atrás, pero que las cosas llegan justo en el momento que tienen que llegar y por eso fue hasta este 2023 que pudo presentar este proyecto que lo tenía en la cabeza desde hace muchos años atrás. De la mano de Leonardo Dicaprio y Robert de Niro, este filme se estrena el próximo fin de semana a nivel internacional.
Scorsese compartió que se metió tanto a esta comunidad, que acudió a varios rituales: “Quería saber más allá de lo que se decía, y aunque podríamos ser diferentes unos a otros, en lo profundo, somos personas con alma y corazón”.
Junto al mexicano Rodrigo Prieto, su fotógrafo de cine de cabecera, compartieron cómo eran los días de filmación, donde mientras uno trabajaba toda la noche para crear la mejor atmósfera de las escenas, al día siguiente llegaba Scorsese y lo cambiaba todo: “Era una locura que la final quedó muy bien. Cambiamos varias escenas pero el resultado es estupendo”, refrendó Prieto.
Después del encuentro con la prensa, el cineasta junto a su equipo se trasladó a un cine al norte de la CDMX para desfilar por la alfombra roja, donde sonriente y agradecido, saludó a cuanta persona estaba a su lado y deseó regresar pronto a nuestro país.
