En la Toscana, Italia, existe una espada incrustada en una roca que muchos consideran una posible inspiración para la leyenda del Rey Arturo.
Ubicada en la Abadía de San Galgano, la espada pertenece a Galgano Guidotti, un caballero del siglo XII que, tras una visión divina, decidió abandonar su vida de violencia.
Como símbolo de su renuncia, clavó su espada en una roca, donde permanece hasta hoy.
La historia guarda sorprendentes paralelismos con el mito artúrico, aunque se originó siglos antes de que el escritor inglés Sir Thomas Malory popularizara la leyenda en el siglo XV.
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