en el Antiguo Egipto, si un gato familiar moría, todos los miembros de la familia se depilaban las cejas en señal de duelo. Los gatos, a lo largo de la historia, han adquirido un estatus envidiable.
Sin embargo, más allá del devocionario humano, también es cierto que los gatos presentan algunas características ciertamente sorprendentes. Sobre todo en cuanto a sonidos se refiere.
Los gatos con capaces de producir casi 100 sonidos diferentes, mientras que los perros solo 10. Un gato, de hecho, tiene la capacidad de cambiar su maullido para conseguir lo que quiera. Puede hasta imitar el llanto de un bebé para obtener comida.
Los gatos también tienen 36 músculos en cada oreja y funcionan como antenas parabólicas, dirigiéndolas hacia la fuente del sonido, así que son capaces de captar sonidos con mucha precisión, extrayendo matices que probablemente no somos capaces de extraer nosotros.
Por ello, uniendo su capacidad de producir sonidos a la capacidad de registrarlos, se ha podido componer música específicamente diseñada para gatos que es capaz de calmarlos. Lo cual es toda una ventaja cuando el gato está estresado porque debe acudir al veterinario o someterse a una cirugía.
Fuente: Redes